Recientemente han mejorado sus instalaciones convirtiéndolo en un gran espacio para cualquier celebración. Su gerente Rafael es todo servicial y capaz de darte un servicio rapido y eficiente. Este día nos encontremos sin él y su personal se encontraba algo despistado.
Elegimos este vino de paso en boca gustoso con aroma de frutas y regaliz con fuerte aroma a cerezas y frambuesa. Su intensidad media nos encantó.
Surtido de salazones. Muy ricos y de gran sabor.
Calamares a la andaluza, muy bien realizados.
Sepia demasiado cortada que no dejaba apreciar claramente su sabor. Deberían dejarla entera para que el corte fuera al gusto de los clientes.
El arroz de punto perfecto, la paellera estaba deforme lo cual originaba que la mayoría del arroz se quedara mas en un lado que en el otro. Las gambas pudieron poner el punto a favor, pero el problema fue negativo pues se deshacían al quitarle la cascara, estaban pasadas. Lastimas de la preparación del arroz pues al final los ingredientes no dieron la altura.
Variado de postres, tarta de queso, tiramisú y pan de calatrava. Normales y no caseros.
Conclusión sus paellas son su punto fuerte y por desgracia no estuvo a la altura. El resto de entrantes de buena calidad. Aún volviendo a que su plato estrella han de ser las paellas no se pueden permitir que los ingredientes que les acompañen estén pasados de fecha.
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