Nos habían recomendado si visitabamos Albacete que pasaramos por este bar restaurante de carretera y teniendo el momento pues, porque no?.
De entrada vimos un servicio rapido y acostumbrado a trabajar con el restaurante a tope. No se ponían nervioso y se organizaban bien.
Obtemos por un menú de trece euros el cual incluia de primero una ensalada mixta.
De segundo había unos siete platos a elegir. Elegimos la ternera en salsa, la carne estaba bien blanda y los condimentos bien realizados pero me faltó más sabor en la carne. Me paso desapercibido este plato.
De tercero nuevamente entre siete platos recogimos el codillo. Bien de sabor pero algo duro y seco.
El osobuco en su punto fue posiblemente lo que más me gustó del menú.
El postre tarta de queso fue la escogida en una amplia variedad. Directa del supermercado fue lo que nos pareció.
En resumen un buen servicio con una gran variedad de productos que no dejan de ser normales con una poca elaboración pero que acompaña un precio nada elevado.
No está mal pero podría mejorar.
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