Maestral (Alicante)
Precio por comensal.: 40 a 45 euros
Fundado por José Manuel Varó referente de la cocina alicantina con situación en la zona residencial de Vistahermosa. Un chalet convertido en restaurante con amplios ventanales rodeado por un jardín que le otorga cierta belleza extra al igual que serenidad. Esta realizado con muy buen gusto.
Su servicio aunque muy serio y profesional comete varios errores simples que podrían ser fácilmente solucionados.
Su comida no es menos y también cometen algunos errores. Así que vamos a verlos.
Su adornado blanco y negro entona perfectamente con la luz que da paso por sus ventanales. Gran gusto.
Nos obsequian con un gazpacho bien elaborado que nos sienta de maravilla.
Croqueta de marisco
2.50 euros por comensal.
Su presentación muy buena así como su interior, cremoso y sabroso. No sabría adivinar los componentes que la forman.
La volvería a pedir sin dudarlo.
Pulpo con cremoso de pimentón
22 euros
El pulpo estaba en su punto, el cremoso tenía poco sabor notando el pimentón muy por lo bajo.
Su precio es algo elevado para lo que ofrece.
10 euros
A parte de una presentación algo brusca el huevo lo sacaron un poco pronto dejando la clara sin cuajarse. La bechamel sabia a trufa ligeramente.
Arroz de rape y gambas
19 euros
El punto era el correcto. Aún así le faltaba el sabor que no lo acompañaba.
Pusieron el paellero en otra mesa y nos sirvieron, sobrando la mitad de la paella que era para tres, en ningún momento se ofrecieron a reponernos el plato y se la llevaron. Estábamos llenos y no nos importo pero es un detalle a tener en cuenta que a algunos les gusta repetir y habiendo... o se debe de dejar en la mesa o ofrecer.
Torrija
7.50 euros
Estaba caramelizada y bañada sopa de leche merengada.
Me encantó.
Valoro el echo de los platos caseros y de que sean buenos.
Vimos bastante personal pero aún serio y a simple vista profesional. Echo de que el servicio no estuviera a la altura apartaban botellas de agua o vino en otra mesa y al estar vacías las copas no eran rellenadas y los comensales se levantaban para servirse ellos mismos. En estas circunstancias lo mejor una cubitera y ponerla en la mesa del comensal. Hicieron lo propio con el arroz.
Detalles que marcan la diferencia.
Sus platos cometen el mismo error no estando a la altura de la expectativa.
Nos quedamos con las instalaciones las cuales eran una maravilla.
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